Hemos recibido con profundo pesar la noticia de que, como resultado de los ataques terroristas perpetrados en Quetta, capital de la provincia de Balochistán, los funcionarios de seguridad pakistaníes fueron martirizados y heridos.

Condenamos enérgicamente estos atroces ataques terroristas y deseamos la misericordia de Dios para los que perdieron sus vidas y una pronta recuperación de los heridos así comotransmitimos nuestras condolencias al Gobierno pakistaní y al pueblo hermano de Pakistán.