La resolución titulada " expresando preocupación por la alianza entre los EE.UU. y Turquía" adoptada el 10 de junio por la Cámara de Representantes de los EE. UU. es completamente inconsistente con las relaciones de amistad y alianza profundamente arraigadas entre Turquía y los EE.UU., tal como lo habíamos declarado antes. Es absolutamente imposible aceptar las acusaciones injustas e infundadas incluidas en esta resolución sobre la política exterior y el sistema judicial de Turquía.

Como lo hemos enfatizado siempre, el diálogo y el respeto por las decisiones soberanas de los países es la forma más efectiva de resolver las diferencias de opinión. En lugar de hacer esto, es inaceptable adoptar resoluciones que no son vinculantes y no sirven para aumentar la confianza mutua, mantener en la agenda el lenguaje de amenazas y sanciones e imponer plazos artificiales.